La ingesta recomendada de macronutrientes generalmente puede conseguirse a través de la dieta sin el uso de suplementos de proteína o aminoácidos, si el aporte energético es el adecuado para mantener el peso corporal.
Como seres humanos hemos evolucionado con una dieta que incluye carne y vegetales durante más de 100.000 años y nuestros cuerpos están creados para comerlos. En las últimas décadas hemos pasado a adoptar dietas bajas en grasas y altas en carbohidratos saturadas de alimentos ultraprocesados llenos de azúcares refinados y grasas poco saludables. Esta es una de las razones principales por las que tenemos graves problemas de obesidad, diabetes, cáncer, alergias, enfermedades coronarias o depresión por mencionar solo alguna.
Comiendo alimentos en su estado natural y que sean nutricionalmente densos, ingieres todas las vitaminas, minerales y nutrientes presentes en la comida beneficiándote de sus ventajas nutricionales.
Comer y cocinar ingredientes naturales es la mejor manera de controlar y reducir tu consumo de azúcares refinados, carbohidratos de alto índice glucémico, grasas y aceites no saludables y de otros aditivos peligrosos como los conservantes, el glutamato o los nitratos. Además de ser una opción más saludable, la comida de verdad simplemente sabe mejor y te hace sentir mejor.